Que pinchen aquí, Karmelo (A ver si aprendemos)Este es el primer nº, saldrá los lunes y jueves
(Coca, ya sabes...)
jueves, 30 de junio de 2011
15M lanza un periódico
martes, 28 de junio de 2011
Juego de palabras
Corría el año 1904 y aquella tertulia, que había abierto el gallego Ramón María del Valle-Inclán en el Nuevo Café de Levante, hervía por las noches con la flor y nata de los intelectuales de la Generación del 98 y los artistas más significados, entre ellos Ignacio Zuloaga, Gutiérrez Solana, Santiago Rusiñol, Mateo Inurria, Chicharro, Beltrán Masses o Rafael Penagos.
Y aquella tarde noche del 13 de mayo de 1904 el que sorprendió a todos los presentes fue Pío Baroja. Porque cuando se estaba hablando de los españoles y de las distintas clases de españoles, el novelista vasco sorprendió a todos y dijo:
“La verdad es que en España hay siete clases de españoles… sí, como los siete pecados capitales. A saber:
1) Los que no saben;
2) los que no quieren saber;
3) los que odian el saber;
4) los que sufren por no saber;
5) los que aparentan que saben;
6) los que triunfan sin saber, y
7) los que viven gracias a que los demás no saben.
Estos últimos se llaman a sí mismos “políticos” y a veces hasta “intelectuales”.
sábado, 25 de junio de 2011
Ánimo, chic@s, que estamos en verano...
...............................................
viernes, 17 de junio de 2011
Banco Santander al desnudo.
www.youtube.com/watch?v=jg738pLUDio&feature=player_embedded#at=83
lunes, 13 de junio de 2011
Por si alguien sigue confundiendo estas siglas (psoe) con el concepto "IZQUIERDA"... y además, mirad quien lo escribe, un excómplice de asesinato(GaL)
Bienvenidas/os al circo. YUHUUUUUU!!!!
Anoche tuve un sueño, de Julio Feo en Público
Rubalcaba era el candidato del PSOE para las próximas generales.
En la conferencia política del PSOE (que se celebrará en septiembre, pero en mi sueño ya había tenido lugar), el Partido Socialista giraba a la izquierda.
En lo macroeconómico, poco se puede hacer porque la globalización, los mercados y las instituciones políticas y financieras supranacionales obligan a mantener la ortodoxia.
Pero el candidato se comprometía a que no se dilataría la puesta en marcha de ninguna de las medidas que se aprobaban en la conferencia ni se convertirían en agua de borrajas.
Se recuperaban los impuestos al patrimonio y el de sucesiones.
Los salarios anuales de más de 200.000 euros se gravaban con el 45%.
Los bonos e indemnizaciones que den las empresas a sus directivos, por la razón que sea, serán considerados como beneficios de las empresas y gravarán como tales. No podrán aplicarse al capítulo de gastos en salarios.
Aquellos que reciban bonos o gratificaciones tributarán por ellos como parte de su salario.
Aumento considerable a la fiscalidad por los beneficios de la banca.
Ley de dación en pago para la hipoteca.
Aumento de la fiscalidad sobre los beneficios empresariales y severo control sobre la ingeniería financiera que permite a los mayores contribuyentes eludir buena parte de sus obligaciones tributarias.
Dotar de protagonismo a todos los medios de lucha contra el fraude fiscal, incluido un reconocimiento público al importante papel que juega la inspección de Hacienda como avanzada en la lucha contra el fraude.
Que se ponga plazo definitivo y creíble a la remodelación del sector de cajas de ahorros (reputado como el mayor riesgo actual del sistema financiero español). La entidad que en el plazo prefijado, que debe ser breve, no consiga el capital requerido, será intervenida por el Banco de España y, en su caso, liquidada ante la mirada de un fiscal especializado en delitos financieros por si apreciase delitos en la gestión anterior (que aparecerán). Además, se evitará que las cajas que cuentan con financiación pública para su salvación sean “regaladas” a particulares con buenas conexiones políticas (algún ejemplo de esto tenemos muy cerca en Madrid).
Que se auditen, con carácter de urgencia, todas las comunidades autónomas y que se hagan públicos los resultados de la inspección.
Que por decreto-ley se legisle la transparencia total para las cuentas de la Casa Real. Que se exija justificación de cualquier gasto, al igual que a cualquier otro organismo del Estado. Y que los gastos de viajes realizados con fines personales y cargados a otras partidas (aviones, hoteles, etc.) se deduzcan de la asignación. Que la partida aumente o disminuya en la misma proporción que las restantes del Estado.
Que sean públicos y detallados los gastos del Patrimonio Nacional.
Que se cumpla de una vez y sin dilación el artículo de la Constitución donde se establece la separación entre la Iglesia y el Estado.
Que se dé por terminado el Concordato y se suspenda ya la prorrogación de facto que existe en la actualidad. Por tanto, que desparezcan los símbolos católicos de las instituciones públicas, incluido el ejército: adiós a los capellanes castrenses.
Que se imponga el principio de que la Iglesia es una institución de carácter privado y que opera sobre las conciencias individuales de los ciudadanos. Por tanto, serán católicos los que lo deseen y, a título personal, todas las personas que quieran podran contribuir económicamente a su mantenimiento, pero nunca más los Presupuestos Generales del Estado.
Que se haga una ley electoral que no permita que nadie que esté imputado o tenga la menor cuenta pendiente con la justicia, pueda estar en ninguna lista electoral. Hasta entonces, que en las listas del Partido Socialista no haya ni una sola persona en esas condiciones.
Que el PSOE se comprometa a hacer una reforma de la ley electoral, haciéndola más proporcional y estableciendo las listas abiertas, aunque eso nos cueste votos en el futuro.
Que se haga más fácil la posibilidad de la iniciativa popular en los referendos.
Que la ley de transparencia se amplíe y se haga más estricta y se aplique ya.
Que los delitos de corrupción no tengan prescripción y sean válidas todas las pruebas, fotos, grabaciones.
Que se ponga un límite a los regalos que se puede quedar un político. A partir de ese límite, se podrá disfrutar del regalo mientras se esté en el cargo pero al dejarlo, el regalo pasa a ser propiedad del Estado (como en otras democracias occidentales). Evidentemente, todos los regalos tendrían que ser registrados en un registro público.
Hacer una nueva ley de memoria histórica y acabar con aberraciones como el Valle de los Caídos, el reciente Diccionario Biográfico de la Academia de la Historia, etc. Y apoyar con todos los medios iniciativas para aclarar asuntos pendientes tan dolorosos como los niños robados y vendidos, los muertos despreciados en la cunetas, etc.
Que desaparezcan de una vez todos los símbolos referentes a la Guerra Civil aun si están en propiedad privada a la vista del público.
Que se convierta en delito la apología del fascismo o del nazismo.
Después de aprobar este programa, en mi sueño, Zapatero dimitía en un gesto de generosidad y conseguía que se pactara con catalanes y vascos la investidura de Rubalcaba.
Que Rubalcaba formaba un Gobierno con pesos pesados.
Que en octubre, el PSOE se ponía a cinco puntos del PP y Rubalcaba seguía teniendo mejor puntuación que Rajoy, que seguía sin aprobar.
Que en noviembre había una crisis del PP y se barajaban nombres, Rato y Aznar entre otros, para sustituir a Rajoy.
Que en diciembre en las encuestas había un empate técnico.
Me despierto del sueño y ganamos las elecciones.
Julio Feo es sociólogo. Fue secretario general de la Presidencia con Felipe González.
jueves, 9 de junio de 2011
organigrama completable
lunes, 6 de junio de 2011
domingo, 5 de junio de 2011
sábado, 4 de junio de 2011
jueves, 2 de junio de 2011
Con vuestro permiso...
Al hilo de las acampadas de los indignados, se remueven muchas cosas, en los jóvenes y en los viejos. Y es bonito ver que cada cual toma el megáfono, y habla.
Pues, con vuestro permiso, y aunque sea en este tablón, hablo yo.
A mi modesto entender, esto es, ante todo y sobre todo, una debacle moral.
Nos ha tocado vivir, en los pasados 20, 30, 40 años, un momento histórico de grandes logros en la calidad de vida colectiva, en los que prácticamente se había tocado techo: pleno empleo, sanidad y educación gratuita, dedicación de importantes medios a actividades sociales, fin del servicio militar obligatorio, aceptación (al menos teórica) de la igualdad de género, de la homosexualidad..., y un largo etcétera.
Nunca jamás antes tanta gente, mucha gente, casi toda la gente de este país (y digo la gente, no un 8 % de la gente) había vivido tan bien. Nunca jamás. Ni de lejos.
Esto se había producido por una serie de circunstancias: conciencia del duro pasado, ilusión colectiva, abundancia de medios (energía barata y abundante), lucha social... y un importante componente moral (religioso y/o político).
Había una clara conciencia de que, no sólo individualmente, sino especialmente a nivel colectivo, vivíamos cada vez mejor, vivíamos bien. Y había un sistema moral reconocible (individual, colectivo y social) que castigaba los comportamientos antisociales (el ladrón el violador, el explotador, el corrupto...). Un sistema moral, colectivo, común.
La sociedad se reconocía a sí misma, se defendía a sí misma, y castigaba los comportamientos antisociales. Y al que tenía un comportamiento antisocial, la justicia lo llamaba culpable, y la sociedad lo llamaba sinvergüenza. Y existía una exclusión legal (la cárcel) y una exclusión social (el rechazo moral).
Pero llegó un momento, digamos que hace como 40 años, en que esto empezó a romperse. Determinados individuos antisociales se defendían vigorosamente frente a la justicia, y la justicia no podía o no sabía condenarlos. Determinado abogados defendían vigorosamente a personas claramente antisociales buscando y aprovechando descaradamente fisuras del sistema legal. Y el sinvergüenza no era castigado penalmente, aunque una gran parte de la sociedad le volvía la espalda.
Poco a poco, más y más sinvergüenzas se fueron saliendo con la suya. Se ha ido instalando una nueva cultura de la sinvergonzonería. Una cada vez mayor parte de la sociedad ha ido reculando, desconcertada, viendo cómo se subvertía el orden moral: el antisocial no era castigado, sino que adquiría ventajas, aplauso y poder.
Se establece una situación de hecho: el antisocial PUEDE sobrevivir y medrar en esta sociedad. Se ve, se percibe y se demuestra.
Y eso tiene una doble consecuencia.
Primera, muchos se plantean: ¿Porqué no? Pues yo también. Yo también, si puedo, pisaré, robaré, me aprovecharé... Yo también, si puedo, seré antisocial, y no pasará nada, no seré excluido, y sé que encontraré dónde ser bien recibido, dónde sentirme acogido. Adelante, todo vale. Los partidarios del “todo vale, yo a lo mío” están desguazando el sistema social y se están repartiendo los cachos. El “¿porqué no?” no tiene límites, no tiene matices. Es “todo y ahora”. Le da igual todo, el cambio climático, la selva amazónica o la supervivencia de la humanidad. No ve más allá porque no le interesa el más allá. Solo el yo, el aquí y el ahora.
Una importante parte de la población se instala en una postura egoísta y antisocial.
En esa situación, la voluntad democrática no necesariamente defiende el interés colectivo, sino la suma de intereses individuales coyunturalmente coincidentes.
Segunda, quienes siguen teniendo una cierta conciencia social, están (estamos), ciertamente, encogidos, desconcertados, viendo que esto se nos va de las manos, y sin encontrar manera de frenar esto, ni de proponer actuaciones prácticas.
En mi opinión, es desde esta desesperanza, o al menos desde la conciencia de una difícil esperanza, desde donde encuentran lugar y sentido las opiniones aquí traídas de personajes como Eduardo Galeano o Agustín García Calvo, sin duda sabios en humanidad, y que contemplan las movidas del 15M con enorme simpatía aunque sin alineamiento.
De ellos no vendrá la solución. De ellos y de otros, vendrán, como mucho algunas ideas.
Éste es otro mundo. Otros problemas. Otros retos. Y, no lo dudo, otras soluciones.
Por eso, creo, algunos sabios en humanidad os quieren quitar de la cabeza las viejas propuestas, las viejas soluciones que ya no funcionan, y que ya nunca volverán a funcionar.
Y entones, ¿QUÉ???
Entonces, encontrad vosotros la solución. Este es vuestro mundo, vuestro reto.
Encontrad vuestra solución.
The answer, my friend, is blowing in de wind.
Con todo mi corazón, os deseo suerte.
----------------------------------------------------------------------------