Me flipan
estas fotos.
Porque no hay niños posando, hay niños jugando y mientras su padre les hace fotos.
Porque rebosan libertad, felicidad y diversión.
Porque en cualquiera de ellas me parece ver a mis primos, hermanos o a mí misma cuando éramos pequeños en León.
3 comentarios:
¡Qué suerte de infancia!
Sí, antes el mundo era diferente.
Aunque ahora también tiene cosas buenas, ¿no?
Por ejemplo...
Esto...
Bueno, ya se me ocurrirá.
El mundo fué y será siempre diferente a qualquier momento que tomes como referencia, pero siempre habrá buenos amigos. Eso es lo bueno Gabriel.
Toma ya como estoy hoy, p'a chillarme.
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